Este corto artículo se centra en el idioma como componente de la característica nacional utilizada comúnmente dentro del comportamiento nacionalista. El lenguaje es un nacionalismo que es exhibido alrededor de varios ejemplos empíricos de algunos países del Sudoeste Europeo y su forma de ejercitarlo o tratar con él. El artículo comienza con una metáfora que se ubica en una estancia para estudiantes de la universidad de Bulgaria. Donde para poder cantar todas las canciones, los estudiantes necesitan familiarizarse con lenguas de países vecinos. El artículo trata de demostrar que en el proceso de intensificación del estudio de lenguas extranjeras se provocará el intercambio cultural y profesional entre las naciones y por tanto controlará la tensión nacionalista.