
El presente texto se da por la inquietud compartida por la filosofía y por su carácter práctico y terapéutico, siendo un producto de investigación. Este se divide en varios apartes que marcan el camino a intentar responder a la pregunta ¿quién es el filósofo consultor y qué necesita para serlo? En el primer aparte se plantea el malestar existencial como una problemática con la que “el hombre de carne y hueso” vive y no siempre comprende y afronta. En segundo momento se presenta la fenomenología, la hermenéutica y la lectura y praxis existencial como herramientas para la consultoría filosófica en contexto, allí se procura mostrar algunos elementos metodológicos que hacen parte de la práctica de la filosofía con fines terapéuticos. El tercer momento es abordar a partir de estas herramientas presentadas el perfil y cualidades del consultor filosófico desde la sabiduría. En el cuarto momento se identifican algunos problemas vinculados a la “filosofía práctica” y a la “consultoría filosófica” en contexto. En las conclusiones queda postulado que el asunto de la consultoría filosófica está aún en construcción y deconstrucción constante.