La extracción de recursos naturales y minerales,
junto con el desarrollo del conflicto armado ha obligado a diversas comunidades étnicas, entre ellas la del pueblo Emberá Dobida - del departamento del Chocó, Colombia - a ubicarse en un contexto urbano, específicamente en la ciudad de Quibdó, su capital. Durante este proceso, sus saberes ancestrales comienzan a configurarse, una vez hacen contacto con el occidental. El enfoque metodológico de la investigación es el cualitativo, debido al abordaje profundo de los datos, desde la experiencia de vida de los participantes, quienes pertenecen a una
comunidad indígena; específicamente al pueblo Emberá Dobida. Provisionalmente, se ha podido dar cuenta de un recorrido por las prácticas tradicionales de dicho pueblo en los territorios de orígen y cómo han cambiado en el territorio actual. Con
esto se ha podido concluir hasta ahora, que dichas prácticas se ven amenazadas por la ruptura de los vínculos entre la cotidianidad, el territorio y lo espiritual. Pero también, existen algunas manifestaciones de resistencia que buscan mantener
vigentes aquellos saberes ancestrales que se puedan ajustar a las condiciones del nuevo territorio.